¿Qué pasó con el Comité del Deporte que tanto “cacarearon” algunos dirigentes de ligas y que finalmente solo quedó en un buen intento por lograr que las autoridades voltearan a ver a este sector y que le brindaran mayor apoyo, sobre todo en lo que se refiere a espacios para el desarrollo de sus actividades?.
Esa es la pregunta que se hacen deportistas porteños, que han visto como poco a poco un proyecto que pintaba interesante, terminó en la basura por culpa de presidentes, que con tal de cuidar sus intereses personales traicionaron a los que inocentemente creyeron en la idea que les fue planteada en un principio.
En RASO y COLOCADO lo advertimos y desafortunadamente resultó cierto, los golpes bajos llegaron muy pronto, y con ello la división del grupo que integraban dirigentes de ligas y promotores deportivos.
Gaudencio García, Presidente del Futbol Nueva Obrera; Miguel Ángel Fernández, del baloncesto Intercolonias La Noria y de la Liga Regional Infantil y Juvenil: y Tomás Avila Núñez, del Basquetbol Municipal, entre otros, emprendieron la huida cuando se percataron de las verdaderas intenciones de quienes encabezan dicho movimiento.
El “Grillo”, considerado uno de los dirigentes más polémicos en este puerto, no soportó que, según él, estuvieran utilizándolo para que otros se beneficiaran con horarios en escenarios para el desarrollo de sus jornadas de fin de semana.
Por su parte Miguel Angel Fernández prefirió hacerse a un lado, pues consideró que no tenía caso estar ahí, simple y sencillamente porque él, hasta ahora, no padece de falta de escenarios.
Y Don “Tomy”, al ver cómo se manejaban las cosas en el Comité, también decidió dar un paso al costado.
Los tres tuvieron sus razones para abandonar el barco y se entiende, porque a partir de que se nombró a la directiva que dirigiría los destinos del grupo, contrario a lo que muchos pensaban, cada quién jaló por su lado en busca de beneficios para su organización.
Es decir, se cumplió lo que todos, incluyendo a un servidor, veíamos venir, los intereses personales de dirigentes terminaron echando por la borda el objetivo del Comité del Deporte, el cual ha perdido fuerza. al grado de que actualmente ya ni se escucha. ¿Será que todavía existe?.
Ah, y con esto quedó demostrado una vez más, que en Coatzacoalcos el deporte no está, ni estará nunca unido, y por eso las autoridades siguen teniéndolos en el orden de prioridades en el último lugar.
Nos vemos SDQ.
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