CRECE O MUERE, VENTAS CON ESTRATEGIA: La medalla Olímpica que no ves.

Escuchado en un bar de Monterrey durante el último día de competencias en París 2024:

—Hay países con menos recursos que nosotros y ganaron varias medallas. Eso significa que el talento y el trabajo duro pueden superar las dificultades. Pero en México parece que todo es excusas.

—Exacto. Y después salen con frases como “hicimos lo mejor que pudimos” o “hay que valorar la experiencia”. A ver, si vas a las Olimpiadas, vas a ganar. ¡No a “tener experiencia”!

Persona 1:

—A los competidores mexicanos les faltó garra para ganar medallas.

Qué fácil  es criticar a los deportistas desde la barra de un bar, la mesa del comedor o desde la cama. Podrías decir “pues sí, eso es lo que hacen ellos como profesión, deberían hacerlo mejor”. Entonces yo te pregunto: tú como empresario o ejecutivo, ¿ganarías alguna medalla mundial? Seguramente, a menos que seas el director de Bimbo, CEMEX, GRUMA o algunas otras, estarás muy lejos del podio. Pues nuestros criticados deportistas compiten en un mercado mundial y son de los mejores veinte de su deporte.

Por ejemplo, los clavadistas de élite, quienes nos dieron dos medallas en estas olimpiadas, hacen entrenamiento de fuerza, resistencia, flexibilidad, aeróbico, fortalecimiento de core, trabajo técnico y simulación en seco, entrenamiento mental y, finalmente, entrenamiento en la alberca de aproximadamente 4 horas al día. Su ruta para llegar a las olimpiadas incluye ganar torneos estatales, nacionales, panamericanos y mundiales clasificatorios.

La pregunta clave es con esa preparación y compromiso, empresario, ¿podrías pasar de ser medallista en tu ciudad a serlo en el país? Y si lo eres en el país, ¿podrías serlo del mundo? O, como vendedor, ¿podrías pasar de ser el mejor en tu área a ganar la medalla de oro en tu empresa? ¿Podrías convertirte en el mejor en tu industria a nivel nacional? ¿Y a nivel mundial?

Si tienes la determinación, podrías aprender de estos atletas y seguir estas recomendaciones:

Mentalidad Competitiva: Adopta la mentalidad de un atleta olímpico. Se trata de dar lo mejor de ti cada día, tanto en cuerpo, mente y espíritu, de estar en la cima de tu juego y de superar tus logros constantemente

Preparación Constante:  La mentalidad debe complementarse con conocimiento, invierte en tu desarrollo personal y profesional. Los atletas olímpicos lo realizan durante años; ¿cuánto tiempo estás invirtiendo en prepararte para ser el mejor en tu mercado? Cursos, libros, pláticas con expertos, Coaches, todo cuenta.

Resiliencia: Al igual que los atletas que no ganan una medalla, aprende a aceptar las derrotas como parte del proceso. Lo importante es cómo te recuperas, sigues adelante, y cómo aplicar los aprendizajes recibidos en futuras oportunidades.

Enfoque en el proceso, no solo en el resultado: No te obsesiones únicamente con los resultados finales. Valora y disfruta el proceso, y reconoce los logros a lo largo del camino.

Como los atletas olímpicos, tú también puedes ser parte de una élite. No todos pueden ganar, pero el verdadero triunfo reside en el esfuerzo y en la dedicación para convertirte en la mejor versión de ti mismo. Tienes la capacidad de alcanzar nuevas alturas en tu mercado o en tu vida, pero esto tiene un precio. ¿Qué estás dispuesto a hacer hoy para ganar tu medalla, aunque solo tú puedas verla? Identifica una habilidad o disciplina clave, trabaja en ella cada día y conviértete en el campeón de tu industria. Hazlo por ti.

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