Con el incremento de las temperaturas en los últimos días, se duplicó la venta de agua en garrafones de 20 litros en esta ciudad.
El intenso calor está provocando que los ciudadanos tengan más sed, por lo que el consumo de agua es mayor para no deshidratarse y sufrir una descompensación del cuerpo.
Los vendedores del vital líquido reportaron que anteriormente en promedio vendían alrededor de 80 garrafones de agua al día, sin embargo, ahora están comercializando hasta 160.
Esta demanda ha generado ganancias sustanciales para los vendedores debido que los ciudadanos se están abasteciendo de agua para enfrentar las condiciones extremas de calor.
Los médicos han recomendado a la población mantenerse hidratados, especialmente para aquellos que realizan actividades al aire libre o trabajan en ambientes expuestos al sol durante largas jornadas.
La compra de agua se ha convertido en una prioridad para los hidrómilos en estos días de calor intenso, por lo que incluso los puntos de rellenado de garrafones lucen con filas largas, generalmente por las noches.
Luis Enrique Santiago, un muy conocido vendedor de agua que cubre el primer cuadro la ciudad, tuvo que incrementar su ‘stock’ y asegurarse de contar con suficiente suministro para cubrir la demanda no solo de sus clientes, sino también de los nuevos consumidores.
Aseveró que la distribución debe ser agilizada para cubrir las entregas programadas, sin embargo, también en la planta purificadora debe mantener la disponibilidad constante del producto.
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