Irresponsable quemaba plásticos en pleno centro de Villa Cuichapa

Sin importar el daño al medio ambiente y mucho menos que a unos metros se localice la comandancia de la policía municipal, un vecino de Villa Cuichapa hizo de las suyas quemando residuos plásticos.

La columna de humo negro, rápidamente llamó la atención de los vecinos en el centro de la localidad, dando parte a los elementos policiacos, por lo que estos se dieron a la tarea de ir en busca de este para hacerle el respectivo llamado de atención.

De acuerdo con lo mencionado por algunos vecinos, esta conocida persona continuamente lleva a cabo actos como el antes descrito, bajo la excusa que se encuentra en su casa, ignorando los problemas que genera a terceros.

Al percibirse un fuerte olor a plástico, vecinos manifestaron molestia, por lo que algunos señalaron que deben existir sanciones ante este tipo de actos, que contaminan el medio ambiente, así como perjudican la salud de las personas.

Desafortunadamente en la localidad muchas personas continúan llevando a cabo este tipo de acciones para deshacerse de los desechos, en lugar de enviarlos al basurero, aunque existe reclamos de personas, estos son ignorados totalmente.

• PELIGROS DE LA INCINERACIÓN DE PLÁSTICOS

¡Quemar los residuos sólidos no es la solución al problema de la ineficiente gestión de los residuos, es un daño a la salud y el medio ambiente!. 

La incineración genera emisiones altamente tóxicas al aire, metales, dioxinas, furanos, gases ácidos, partículas y dióxido de carbonos, las cuales pueden provocar problemas respiratorios, afecciones en los sistemas endocrino, nervioso y reproductivo, además de diversos tipos de cáncer, entre otros padecimientos. 

Asimismo, la incineración puede liberar nanopartículas, contaminantes orgánicos persistentes, que se alojan en los tejidos del cuerpo, entran al torrente sanguíneo y a los pulmones. 

Además, esta forma de gestionar los residuos a través de su conversión en energía mediante la combustión no es funcional para cumplir este objetivo, dado que este proceso genera también cenizas tóxicas.

Lo que es equivalente al 25-30% del total de residuos incinerados, que deberán de todas formas depositarse en rellenos sanitarios, contaminando el suelo y el agua y pudiendo ser inhaladas por las personas.