Entre robo de floreros, daños a las sepulturas y la falta de seguridad, prevalece la inconformidad entre trabajadores independientes del panteón municipal de la colonia Miguel Hidalgo.
“Últimamente se ha visto que quiebran los libros, los tumban; se han perdido casitas dentro del mismo panteón, a pesar de que hay un policía a la entrada del panteón”, externó el dirigente marmolero, Juan López Martínez.
Lamentó que, pese a la presencia de un preventivo en el inmueble, carecen de rondines dentro del cementerio de la ciudad, siendo un problema que afecta a los dolientes y al mismo gremio que muchas veces es señalado como responsable de estos actos.
“En el panteón no hay barda, entonces, los delincuentes y la gente que hace destrozos tiene la manera de entrar sin ningún problema al cementerio”, agregó el dirigente marmolero.
Pidió mayor atención al interior del cementerio, solicitando que la situación sea considerada como una prioridad para la autoridad.
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