Familias del fraccionamiento Eduardo Soto Innes, solicitan a la Comisión del Agua respetar el acuerdo de la condonación del 85% de descuento, por consecuencia de la falta de un servicio idóneo para el uso humano.
Oscar Manuel de Jesús González Delgado, dijo a nombre de los vecinos que el problema del agua es un escenario que vienen gestionando desde la entrega del fraccionamiento, fundado en 2010.
Explicó que a las más de 900 viviendas, llega agua con tierra o lodo; además de otros residuos, por lo que desde 2017, un promedio de 600 familias decidió ponerse en resistencia, y no pagar el servicio, lo que representa un 70% de la colonia.
Especificó que a principios del mes de noviembre se reunieron con representantes de la Comisión del Agua, dándose el compromiso del descuento en el pago del servicio, por lo que se acordó que, a más tardar este 30 de noviembre estarían accediendo al descuento correspondiente, valido por un consumo de 22 meses, equivalente de 2022 a 2023, según lo estipulado por el titular de la oficina, Eulalio González Azamar.
“Se nos ofreció a los jefes de manzana en reunión programada y asistida por dirección de participación ciudadana urbana, en esa reunión, se nos ofreció considerando el problema que tenemos de agua, desde que el fraccionamiento se inauguró, que se iba hacer un descuento de aproximadamente un 85%, al final de cuentas, durante esta semana vamos entregando una serie de documentos, que no se nos mencionó”, expuso González Delgado.
Sin embargo, puntualizó que la sorpresa de muchos fue que al llegar a intentar pagar lo que se consideraría unos siete mil pesos, elevándose el monto a los 25, quedando sin efecto la promesa de descuento, sin dejar de lado recargos y multas.
Recalcó, que las familias se niegan a pagar por un servicio que acusan es de mala calidad, puesto que se trata de líquido no adecuado para su uso.
“Hay problemas de salud, sobre todo en los niños, se debe de usar el uso de agua de garrafón, el agua trae mucho sarro, hay problemas en la piel”, demandó el inconforme.
Atribuyó que gracias a la contaminación, cada 15 días se ven en la necesidad de limpiar tinacos y recipientes, siendo una situación que califican como desagradable.
Por los reclamos que provoca el suministro del servicio a través de un pozo profundo, los inconformes decidieron este día reunirse con autoridades, sin obtener éxito en el caso.
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