Durante la mañana de este sábado, empleados de la sucursal Soriana cerraron las instalaciones utilizando los carritos de compra, como medida de protesta para exigir un pago justo de utilidades.
La medida que impidió el acceso de los clientes durante varias horas, fue para exigir a la gerencia y al cuerpo administrativo considere una distribución justa de las utilidades.
Según los trabajadores, los pagos recibidos este año fueron de entre los 100 y 600 pesos por empleado, una cantidad muy menor comparada con el 2023, cuando el rango fue de 2 mil a 5 mil pesos, lo que generó la molestia de los trabajadores de todas las áreas.
La Participación de los Trabajadores en las Utilidades (PTU) es un derecho laboral consagrado en la Ley Federal del Trabajo (LFT), lo que obliga a las empresas a destinar un porcentaje de sus ganancias anuales a sus empleados, sin embargo, el personal de la tienda Soriana expresó su molestia por los montos bajos recibidos, principalmente cuando la cadena de tiendas no ha reportado pérdidas, ni bajas ventas en sus estados financieros recientes.
Los empleados argumentan que su protesta está dentro del marco normativo, por lo que continuarán manifestándose hasta que sus peticiones sean atendidas.
Hasta la tarde de ayer, la administración de Soriana no ha emitido un comunicado oficial en respuesta a las demandas de los empleados, por lo que se espera que se establezcan posibles negociaciones en los próximos días.
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