Aunque en menor escala a comparación de años anteriores, cazadores furtivos, continúan comercializando aves exóticas sobre la carretera Las Choapas-Ocozocoautla, reconocieron los mismos habitantes de las comunidades rurales.
En palos de escoba, amarrados y en ocasiones sin alimento, son exhibidos principalmente loros, que son pintados, para hacerlos pasar por aves cabeza amarilla, alcanzando un costo de dos mil pesos.
Para detener la depredación de las especies el Gobierno Federal a través de sus dependencias encargadas en el cuidado y preservación no han implementado hasta el momento acciones eficientes para detener este tipo de actos.
También es necesario que se realicen capacitaciones a los habitantes de los ejidos, sobre los temas ambientales, para generar conciencia entre la población y puedan participar como agentes de conservación.
Hay que destacar algunas corporaciones policiacas, son sólo ‘observadores’, debido a que a pesar de la venta de animales exóticos no hacen nada para detener este tipo de actividad.
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