Siguen imparables los abusos por parte de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), luego de que elementos de la Policía Estatal violentaron los derechos del periodista Luis Alberto Ponce a quien lesionaron durante una clara detención ilegal, privándolo de la libertad.
El accionar de los policías estatales fue denunciado ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), luego de que el comunicador tras acudir a cubrir un hecho de tránsito en Carranza y Zamora en pleno centro de la ciudad de Coatzacoalcos, llegaron los policías en la camioneta Toyota Hilux blanca con azul.
“Uno de los policías enfocó a donde yo estaba, por lo que le pregunté que si me estaba tomando una foto, lo cual molestó al que estaba al mando, siendo ese elemento que me dobló el brazo para ponerme esposas, sin mediar motivo y me llevaron a la camioneta donde se privaron de la libertad”, subrayó el reportero.
“Vas pa´dentro, ustedes creen que pueden hacer lo que quieran, también la unidad al corralón”, dijo el policía de baja estatura que daba las órdenes a los otros dos.
“Ustedes no pueden estar cerca de nosotros, debe saberlo”, refirió el uniformado a lo que se le dijo que el área no estaba acordonada, por lo que no había falta alguna.
“Me están lastimando oficial, esto es arbitrario lo que están haciendo, reprochó el comunicador cuando lo llevaban a la camioneta donde permaneció por varios minutos a pleno sol, donde le cerraron la puerta de la cabina con los cristales arriba, estando solamente abierto el del lado del conductor.
“Yo conozco a mucha gente, conozco a tu patrón, es más vas a perder tu chamba”, dijo el mismo elemento policíaco que estaba a cargo y seguía violentando al comunicador, quien le respondió, “háblele”, cosa que no hizo.
Luego de retenerlo contra su voluntad, esposado en el asiento trasero con las altas temperaturas en la camionetas, el comunicador mostró síntomas de afectaciones en la salud, por lo que los policías se acercaron.
“Ya tranquilo, te vamos a soltar, ahora voy a tener que darte mi bote de agua que me vas a pagar en uno o dos días, me costó 18 pesos”, mientras bajaban al compañero reportero.
“Mejor quedamos como amigos, sin bronca”, externó el policía que estaba al frente de ellos, para posteriormente retirarse de la avenida Carranza esquina con Zamora, dejando en ese sector al comunicador con las huellas de las lesiones en ambas muñecas.
Lo anterior fue denunciado para que se proceda conforme a derecho contra estos malos servidores públicos, en especial al que se encontraba al mando, ya que uno de ellos externó que solamente cumplían órdenes.
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