Los pasantes universitarios que realizan servicio social en la infraestructura hospitalaria son víctimas de agresiones desde laboral hasta sexual, pero suelen callar y los delitos quedan impunes, pues en 5 años apenas se ha sabido de 200 casos, cuando deben ser muchos más, señaló Gloria López Mora, presidenta del Colegio de Enfermeras y Enfermeros del Estado de Veracruz, A.C.
El problema es que al alumno en servicio social se le mira como fuerza de trabajo y no como recurso que debe cumplir el requisito parte de la formación profesional, dijo.
Dijo que los jóvenes son objeto de acoso laboral, represión y violencia, traducidos por tanto como hechos de inseguridad.
Pero la situación es peor en algunos casos, sobre todo en las zonas marginadas y alejadas de la mancha urbana.
"Documentados como tal, no; últimamente hemos tenido alrededor de 200, así llegando de manera circunstancial en los últimos 5 años; se ha hecho más evidente a raíz de la situación que han vivido estos médicos.
"Lo que le pasa a ellos le pasa a todos los estudiantes en servicio social en todo el país [...], lo más recurrente, sobrecarga de trabajo, hostigamiento laboral, acoso sexual, y agredir físicamente", subrayó López Mora.
Recordó que hace unos 7 meses sí se removió a un médico de la zona de Cosamaloapan.
El problema es que al no haber denuncia formal todo queda entre los coordinadores de las escuelas y no trasciende, recalcó.
López Mora, resaltó que sí existen convenios legales entre instituciones educativas e instituciones de Salud, pero no se ven resultados.
Demandó que se garantice dignidad a los prestadores del servicio social un lugar idóneo donde vivir, en los casos en que están lejos de su tierra.
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