Maggie Smith, actriz británica, perdió la vida en un hospital en Londres este viernes 27 de septiembre, a la edad de 89 años. De acuerdo con un comunicado que sus hijos Chris Larkin y Toby Stephens hicieron el día de hoy.
"Ella deja dos hijos y cinco nietos amorosos que están devastados por la pérdida de su extraordinaria madre y abuela", expresaron en un comunicado emitido a través de la publicista Clair Dobbs.
La actriz es recordada por su inolvidable papel de Minerva McGonagall en la saga de Harry Potter, en la que durante sus ocho entregas se ganó el corazón de los fans de la literatura de J.K. Rowling.
Smith nació un 28 de diciembre de 1934 y su extensa trayectoria en teatro, televisión y cine la posicionaron como una de las más destacadas del Reino Unido.
A pesar de su avanzada edad, la histrionisa no dejaba de estar activa en el mundo artístico, en el que se le veía acudir ocasionalmente a eventos públicos.
En teatro inició una carrera desde sus 18 años de edad y tuvo papeles como Desdémona en Otelo (1964), La Reina Isabel en Ricardo III (1977), Lady Macbeth en Macbeth (1978) y Rosalind en Como gustéis (1977 y 1978), todas obras de William Shakespeare.
Por otro lado, en el cine formó parte de varias cintas como “Viajes con mi tía”, “Muerte en el Nilo”, “Una habitación con vistas” con Helena Bonham Carter, y “Gosford Park”. Fue la duquesa de York en Ricardo III, Wendy en Hook y Lady Hester en Té con Mussolini.
De sus trabajos en la televisión, fue su interpretación de “Violet”, la condesa de Grantham en la aclamada serie británica “Downton Abbey”.
No obstante, fue en la saga Harry Potter, en la década del 2000 cuando conquistó a las nuevas generaciones encarnando a la carismática “Señorita McGonagall”, ganando reconocimiento mundial, teniendo escenas que todo fan recordará con cariño, por lo que, aquí te dejamos con sus 5 mejores momentos:
1. Su primera aparición
Nos enteramos de que es animaga y que escuchó todo lo que decían los alumnos nuevos a sus espaldas… algo que a nadie nunca le ha pasado ¿verdad?
2. Las clases de baile a Ron
Sin duda, una de las escenas más graciosas del Cáliz de Fuego es cuando la profesora le enseña a un avergonzado Ron cómo debe bailar ante la mirada de todos sus compañeros.
3. El regalo a Harry Potter
Esta es muy especial, ya que, si bien no tiene diálogos, es una joya ver la expresión de McGonagall cuando Harry recibe de regalo su Nimbus 2000 por un “misterioso benefactor”, a quien descubre segundos después. Cabe destacar que la maestra era una fanática del quidditch e incluso llegó a ser jugadora del mismo (su nombre sale en una placa de un equipo antiguo de Gryffindor).
4. El duelo contra Snape
Claro que un enorme porcentaje de fans amó a Snape, pero ver a Minerva dándole su merecido y haciéndolo huir fue épico, ya que además nos demostraba su elevado nivel de pelea.
5. Piertotum Locomotor
En la última película de la saga, la profesora le da vida a las estatuas para que defendieran Hogwarts del ejército de mortífagos de Voldemort, soltando una de las frases más graciosas de toda la saga que ayudó a bajar la tensión de la escena: "Siempre quise hacer ese hechizo".
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