El peligroso trasfondo de los despidos

En los corrillos del palacio de gobierno de Xalapa se comenta que los dos funcionarios que han sido despedidos, Víctor Iván Domínguez, director del Instituto Veracruzano del Deporte y la comisionada del Instituto Veracruzano de Acceso a la Información, Yolanda García, salieron del gobierno por tener el conocimiento de ciertos manejos y movimientos que no convienen que salgan a la luz pública.

El miedo es que sean muy comunicativos y trasciendan ciertos hechos de parentescos prohibidos y de la intromisión de elementos de Marina en una dependencia estatal por sospechas de narcotráfico.

En estos casos para que no haya peligrosos resentimientos es importante ofrecer una salida decorosa y hasta ofrecer un nuevo cargo de consolación para evitar que sean entrevistados por medios de comunicación de oposición que los andan buscando.

Otro caso es el del auditor general del Orfis Antonio Lorenzo Portilla quien investigaba a conciencia las cuentas públicas de las pasadas administraciones estatales y se queda fuera, cuando se le había ofrecido un nuevo cargo dentro del gobierno de Morena.

Son cabos sueltos que en un futuro inmediato pueden ser inconvenientes si no les otorga alguna decorosa compensación.

El ridículo de los panistas acusando de sabotaje

Una amplia y perfecta explicación técnica ofreció el secretario de Comunicaciones, Javier Jiménez Espriu, sobre el accidente en el que perdieron la vida el senador Rafael Moreno Valle y su esposa la gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso

Señaló de manera detallada los problemas que afrontaba el helicóptero en que viajaban, mismo que no estaba autorizado para volar y que a pesar de ello, los dueños de dicho taxi aéreo habían realizado 31 viajes de manera irresponsable y hasta criminal antes de que ocurriera el desplome.

Es importante esta justificación por la intensa campaña de los paranoicos panistas que acusaban al gobierno de Morena de un sabotaje. La Fiscalía federal y la de Puebla deben de ejercer acciones penales a los propietarios de esa empresa, quienes con tal de ganar más dinero pusieron en riesgo la vida de anteriores pasajeros y causaron la muerte de estos reconocidos funcionarios.

Si llegamos a la fase tres sería lo peor

Por muchas razones se debe evitar que lleguemos a la fase tres que implantaría medidas extremas como el toque de queda, -que ya se estableció en Cancún-, por órdenes del alcalde Pedro Joaquín, habría un estado de emergencia donde se impondrían multas y gasta cárcel los que no respeten el confinamiento.

Los cálculos de esta fase es donde se calcula que el Covid-19 infectaría desde el 0.5 por ciento de la población hasta el uno por ciento significaría que cerca de millón 200 mil mexicanos estarían enfermos por eso la preocupación de establecer un control para evitar esa situación tan critica.

Entre los negros vaticinios se espera una explosión de casos en la ciudad de México y Tijuana son las urbes mas vulnerables. El 19 de abril se estima que habrá 149 mil 700 personas infectadas.

Habría una suspensión de cualquier tipo de actividad en centros de trabajo que presenten brotes activos y obligaría a una cuarentena generalizada. Lo cierto es que todos los pronósticos es que inminente el establecimiento de la fase tres y sin duda es el peor escenario para los mexicanos.