La tradicional celebración del Día de Muertos ya está muy cerca y en diversos negocios ya comenzaron a ofrecer los diversos productos que la población acostumbra a adquirir en esta época del año, sin duda lo más representativo es la flor de cempasúchil; elemento indispensable que representa la identidad cultural de nuestro país en esta fecha tan especial.
El nombre de esta flor proviene del náhuatl "Cempohualxochitl" que significa "veinte flores" o " varias flores", gracias a su color y aroma es uno de los elementos más representativos de las ofrendas para los muertos.
La flor de cempasúchil llegó a Coatzacoalcos ya se ofrece en varios espacios de la ciudad en especial en la zona de los mercados; sin embargo hay un lugar en el que tradicionalmente se colocan los vendedores en el que además ofrecen otras flores como la conocida como "mano de león", "margaritas" y "siempre vivas"; convirtiendo esta calle en un inesperado paisaje urbano de aromas y colores.
La aromática y distintiva flor de esta temporada ya se ofrece a la venta en los mercados, centros comerciales, en las avenidas de Coatzacoalcos ya sea en ramos ( mano) o incluso en macetas y es en la zona centro dónde se distingue este espacio al que la población acude cada año a comprarla.
Es junto al conocido mercado Morelos, en la calle Pedro Moreno, entre Hidalgo y Juárez que emerge esta estampa que con sus tonos naranjas, amarillos y morados rompe con el habitual paisaje urbano.
Se trata de un grupo de comerciantes que como cada año cuando se aproxima la fecha para celebrar el Día de Muertos, se instalan en 10 puestos en el camellón a ofrecer las flores, logrando que este espacio se distinga entre el tráfico, el ir y venir de las personas y el ruido de los autos...convirtiendo así ese paso peatonal en un llamativo oasis aromático.
Es así como envueltos en tallos, aromas y flores los comerciantes se extienden en el camellón de la calle Pedro Moreno de Coatzacoalcos, usando unas estructuras de metal, cajas, cartones y mesas para exhibir su colorida variedad.
Mujeres que en compañía de sus hijos van al mercado, hacen la parada en este sendero de flores para preguntar los precios y llevarse envuelto en papel de periódico su mazo o ramo, adolescentes, señores...de todas las edades se han acercado a los comerciantes, pues en muchos hogares de la ciudad ya las familias se encuentra en la plena elaboración de su altar.
La margarita en colores morados y cobrizos también es presentada como una opción más a incorporar al altar de muertos, integrándose así a las diversas alternativas florales que se ofrecen en este camellón de la ciudad que al caminar en el, es parecido a recorrer un sendero con olor a campo y tradición.
En este paisaje de pétalos y una vibrante gama de colores, marca un contraste especial con su intenso color rojo la flor conocida como la mano de león, otro elemento que no puede faltar en las ofrendas dedicadas a los difuntos.
Un dato importante de esta flor aterciopelada es que además de su vistoso aspecto, tiene propiedades medicinales las flores se usan para combatir la diarrea, la disentería, la fiebre, los dolores de cabeza, las hemorroides, el herpes y las úlceras, entre otros males.
Su nombre científico es celosia cristata, esta flor de ornato alcanza una estatura de 40 a 60 centímetros y existe en colores, rojo, amarillo y blanco, siendo la de color rojo la que más predomina en México. Otra de las flores que se vende en esta zona de Coatzacoalcos es la llamada siempreviva que con sus tonos y texturas contribuye a crear ese rustico y sobrio en honor a los fallecidos.
El incorporar esta flor en los altares de muertos es una manera de manifestar el amor y el respeto hacia ellos ya que representa la eternidad y la memoria que perdura, debido a la peculiar característica de mantener su forma y color durante mucho tiempo.
La nube, es otra flor que no puede eludirse en esta época, la tradición indica que se colocan en el altar para las almas de los niños, se dice que su textura, aroma y color permite que las ánimas lleguen y se vayan felices.
Esta flor también es conocida como velo de novia y básicamente se distingue por ser un voluminoso ramillete de florecillas blancas, cuya belleza radica en su aspecto frágil y etéreo.
Así transcurre la espera de los comerciantes quienes, aseguran que al acercarse la fecha del Día de Muertos, las ventas podrían registrar un repunte ya sea para que sean llevadas a los panteones o bien para decorar la ofrenda a los difuntos.
La flor del cempasúchil apilada, en cubetas o dispuesta y extendida en enormes ramos sobre la acera, se lleva el protagonismo con su inigualable color naranja en esta zona del centro de Coatzacoalcos, dónde Día de Muertos no falta quien se acerque para comprar y deleitarse de este inesperado paisaje de colores, texturas y aromas.
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